Inversión en Salud, Healthtech y Farmacéutica en América Latina y el Caribe
- Samuel Fernandez
- 7 jul
- 7 Min. de lectura
Una Suplemento para el Crecimiento y el Bienestar de la Región
La salud, lejos de ser un mero gasto, emerge como una inversión estratégica con un retorno significativo en la productividad y el bienestar social, lo que a su vez impulsa el crecimiento económico. En América Latina y el Caribe, este sector presenta un vasto horizonte de oportunidades para la inversión, particularmente en Panamá, un hub logístico y comercial con un potencial creciente.
El informe Health Innovation & Technology In America & The Caribbean, elaborado y publicado por HolonIQ y BID Lab ofrece un panorama detallado de la innovación y la tecnología en salud en América Latina y el Caribe (ALC).
Entre las principales conclusiones del informe se incluyen:
Desafíos: La región de ALC enfrenta importantes desafíos en materia de salud, como el acceso limitado a servicios de calidad, altos gastos de bolsillo, una creciente carga de enfermedades crónicas (como la obesidad y las enfermedades no transmisibles) y problemas de salud mental. Los desafíos sistémicos incluyen la fragmentación de los datos de salud, la falta de cobertura universal de salud y la escasez de personal. Los desafíos de la industria incluyen equipos obsoletos, variaciones en la calidad de la atención y un mercado farmacéutico subdesarrollado.
Oportunidades: A pesar de los desafíos, existe un gran potencial para que la innovación tecnológica mejore la salud y el bienestar en ALC, especialmente para las poblaciones vulnerables. La pandemia de COVID-19 aceleró la adopción de servicios de salud digitales y destacó la importancia de la salud para el desarrollo económico y social.
Panorama Regional: En la última década, han surgido más de 1200 empresas de innovación y tecnología en salud en América Latina y el Caribe (ALC), de las cuales Brasil alberga aproximadamente la mitad y atrae casi la mitad de la financiación. El ecosistema se centra en la prevención, el tratamiento y los sistemas de salud, con una creciente actividad en el sector financiero de la salud.
Cambios Estratégicos: El informe identifica 15 cambios estratégicos que configuran el futuro de la atención médica, la salud digital y la biofarmacia en América Latina y el Caribe (ALC). Estos incluyen una transición hacia la atención basada en el valor, la salud predictiva, la atención médica minorista y la lucha contra la escasez mundial de personal. En salud digital, los cambios clave son la telemedicina y la telesalud, la salud conectada, los datos y el análisis de datos, la participación del paciente y la interoperabilidad de la atención médica. En biofarmacia, los cambios incluyen el descubrimiento de fármacos mediante IA, los ensayos clínicos descentralizados, los biosimilares y genéricos, la política de precios de los medicamentos y la medicina personalizada.
Tendencias de Inversión: Desde 2010, se han invertido US$3,300 millones en tecnología sanitaria en América Latina y el Caribe (ALC) en más de 1400 rondas de financiación. Si bien la inversión experimentó un aumento significativo durante la pandemia, en 2023 se produjo una fuerte corrección. El mercado aún es incipiente, con pocos fondos dedicados a la salud, y existen desafíos en la financiación inicial, los entornos regulatorios y el logro de escala debido a la fragmentación de las economías del sector salud. Brasil y México dominan la inversión de capital de riesgo en tecnología sanitaria en la región.
Este artículo explora las oportunidades transformadoras que posicionan la salud como un potente motor de crecimiento económico y bienestar social, más allá de ser un servicio esencial. Mencionaremos algunos de los desafíos sistémicos, destacaremos cambios estratégicos y analizaremos las tendencias de inversión, revelando el dinámico panorama de la innovación en este sector. Sin embargo, nuestro principal objetivo es destacar la creciente importancia de Panamá como un centro estratégico para la inversión en las industrias de la salud, la healthtech y la farmacéutica.
La Salud como Motor Económico
Entre 2012 y 2017, la inversión privada en la industria farmacéutica latinoamericana casi se duplicó, pasando de 68,000 millones de dólares a 110,000 millones de dólares. Esta afluencia de capital privado también está impulsando el desarrollo de nuevos dispositivos médicos, tratamientos y medicamentos que revolucionan la atención médica en América Latina.
De acuerdo con otros estudios consultados, incluyendo un reciente análisis de la Universidad de Sao Paulo para FIFARMA, demuestran que la financiación adecuada de los sistemas de salud es una inversión con altos retornos económicos y sociales. Una población saludable es más productiva, lo que contribuye directamente al Producto Interno Bruto (PIB) de los países. Además, un mayor bienestar permite a la población participar en actividades recreacionales, educativas y sociales, elevando la calidad de vida.
La región latinoamericana y caribeña está experimentando una tendencia demográfica de envejecimiento, similar a Asia y Europa. Se estima que para 2030 el 15% de la población latinoamericana tendrá más de 60 años y se proyecta que esta cifra aumente al 20% para 2050. Este cambio incrementa la necesidad de atención médica y, consecuentemente, los costos asociados. Ante este escenario, es imperativo aumentar y sostener la inversión en salud, incluso en periodos de bajo crecimiento económico.
Un Ecosistema para la Inversión: Claves y Oportunidades
Invertir en sistemas sanitarios modernos, accesibles y eficaces no solo salva vidas, sino que también genera nuevas oportunidades laborales de calidad y fortalece las economías locales. Este enfoque de cobertura sanitaria universal, que busca garantizar el acceso a servicios médicos de calidad sin dificultades financieras, es fundamental para crear un ecosistema sanitario que impulse tanto el bienestar como el empleo.
Las oportunidades de inversión se extienden a lo largo de toda la cadena de valor del sector salud, abarcando:
Infraestructura Hospitalaria y Centros de Atención Primaria: La modernización y expansión de instalaciones de salud son cruciales para mejorar la calidad y la cobertura de la atención.
Tecnología Sanitaria (Healthtech): El desarrollo y la implementación de soluciones tecnológicas, como telemedicina, expedientes médicos electrónicos, inteligencia artificial para diagnósticos y gestión de datos de salud, son áreas de rápido crecimiento y alta demanda.
Industria Farmacéutica: La investigación, desarrollo y producción de medicamentos, vacunas y dispositivos médicos son pilares para garantizar el acceso a tratamientos efectivos. La innovación en este campo es vital para abordar las enfermedades emergentes y crónicas.
Servicios de Apoyo y Logística: Desde la cadena de suministro de productos farmacéuticos hasta la gestión de residuos hospitalarios y servicios de laboratorio, existen múltiples nichos para la inversión.
Formación y Capacitación del Talento Humano: La inversión en programas educativos para profesionales de la salud, técnicos y personal de apoyo es fundamental para sostener el crecimiento del sector.
Panamá: Un Centro Estratégico para la Inversión en Salud
La fortaleza de la economía panameña en la última década se ha reflejado en la financiación pública para servicios de salud y medicamentos, que actualmente supera los 3,000 millones de dólares. Por ejemplo, Panamá sigue siendo el mayor importador de fármacos y medicamentos de Centroamérica. La demanda local es alta y el gobierno está ampliando el acceso a la atención médica para la mayoría de la población mediante una política de salud universal. El 80% de la población vive en zonas urbanas, lo que facilita el acceso. El PIB ha crecido de forma constante en los últimos años y la economía es una de las más sólidas y estables de la región.
A medida que el sector se desarrolla, Panamá aspira también a convertirse en un centro farmacéutico para la región. Considerando la ubicación geográfica ideal de Panamá entre América del Norte y del Sur, la conectividad marítima a través del Canal de Panamá y el Aeropuerto Internacional de Tocumen, el más grande de la región, estos factores lo convierten en un lugar propicio para los negocios, junto con incentivos fiscales. Las empresas pueden elegir Panamá no solo para consolidar sus operaciones en Centroamérica, sino también para invertir en su propia expansión en Latinoamérica.
Las leyes panameñas, como la Ley No. 41 de 2007 (conocida como Ley de Sedes de Empresas Multinacionales) y sus enmiendas, ofrecen un marco legal favorable para que empresas multinacionales establezcan sus sedes regionales. Estas empresas, conocidas como SEM (Sedes de Empresas Multinacionales) y EMMA (Empresas Multinacionales para la Prestación de Servicios Relacionados con la Manufactura), se benefician de una tasa impositiva reducida sobre los ingresos generados en el país, y no requieren un Aviso de Operación.
El Ministerio de Comercio e Industrias ha desarrollado programas para centralizar la gestión de licencias, procesamiento de visas y beneficios para empleados extranjeros, simplificando la entrada de capital foráneo. Además, la Ley No. 76 de 2009, enmendada por la Ley No. 25 de 2017, fomenta el desarrollo competitivo del sector industrial y agroindustrial, incluyendo a las micro, pequeñas, medianas y grandes empresas de manufactura y transformación.
Estas políticas, combinadas con la creciente demanda de servicios de salud en la región, hacen de Panamá un destino atractivo para las inversiones en hospitales de especialidades, centros de investigación farmacéutica, desarrollo de soluciones healthtech y manufactura de productos médicos.
En conclusión, la inversión en salud no es solo una cuestión de bienestar, sino una estrategia inteligente para el crecimiento económico sostenible en América Latina y el Caribe. Paralelamente, los gobiernos de América Latina y el Caribe tienen la imperiosa necesidad de fortalecer sus sistemas de salud, lo que implica no solo un incremento sustancial en la asignación presupuestaria para el sector, sino también la implementación de reformas estructurales profundas. De acuerdo con los expertos, estas reformas deben enfocarse en mejorar la eficiencia operativa, optimizar la gestión de recursos y, fundamentalmente, elevar la calidad y la accesibilidad de la atención médica para todos los ciudadanos. La inversión en infraestructura, tecnología médica, formación de personal sanitario y programas de salud pública es crucial para afrontar los desafíos actuales y futuros de la región.
Para los inversionistas y las empresas, esta coyuntura representa una oportunidad estratégica y sin precedentes. El creciente interés por la salud, impulsado por una mayor conciencia social y la necesidad de resiliencia ante crisis sanitarias, convierte a este sector en un foco de inversión atractivo. La oportunidad no solo radica en la contribución al desarrollo social y al bienestar de las poblaciones, sino también en la posibilidad de obtener rendimientos económicos significativos en un mercado caracterizado por su expansión y su potencial de crecimiento a largo plazo. La inversión en salud, healthtech y la industria farmacéutica en América Latina y el Caribe no es solo una cuestión de responsabilidad social, sino una decisión inteligente desde una perspectiva de negocio.
A medida que las oportunidades en el sector salud siguen evolucionando, es crucial que las partes interesadas se mantengan informadas y se adapten a las dinámicas cambiantes del mercado.
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